
Bienestar animal y buenas prácticas ganaderas
El Bienestar Animal (BA) es un tema complejo, de múltiples facetas que incluyen aspectos científicos, éticos, económicos y políticos, así como culturales y religiosos. Los consumidores de alimentos de origen animal cada vez son más exigentes en cuanto al origen y el trato que recibieron los animales productores de alimento. Por ello se tiende a percibir como una traba a la producción.
Según FAO, en 2050 la población mundial será superior a los 9 mil millones de personas, habrá que aumentar la producción de alimentos y el consumo de carne aumentará de 200 a 460 millones de toneladas.
Los países de América Latina están llamados a abastecer al mundo con proteína de origen animal, pero este proceso deberá hacerse cuidando el MEDIO AMBIENTE, produciendo alimento sano e inocuo a partir de animales sanos y respetando el BIENESTAR ANIMAL.
El concepto de BA se apoya en Las Cinco Libertades (Farm Animal Welfare Committee, Reino Unido 1965), estas implican que los animales estén libres de: hambre y sed; malestar físico y térmico; enfermedad y lesiones; para poder expresar un patrón de comportamiento normal, miedos y angustias.
Frente a esto, nos preguntamos: ¿Se puede medir el bienestar de los animales? ¿Qué parámetros debemos utilizar para no incurrir en apreciaciones subjetivas?
Indicadores basados en el medio ambiente que rodea al animal y fundamentalmente en el propio animal. Ellos van desde las instalaciones, espacio, ventilación a los indicadores fisiológicos, de comportamiento, relacionados con la salud del animal (enfermedades hasta muerte), con la producción y calidad del producto final: en este caso: la carne. Transporte y sacrificio también deben ser contemplados.
En países productores y exportadores de carne de alta calidad a los mercados más exigentes, como es el caso de Uruguay, el impacto económico de un deterioro en el bienestar de los animales puede ser crucial.
Los animales tratados incorrectamente en las etapas previas a la faena sufren lesiones de variada índole ypresentan ganancias de peso inferiores, produciendo carne de baja calidad lo que implica decomisos de trozos de diferente magnitud y grandes pérdidas económicas EN TODA LA CADENA PRODUCTIVA.
Los manejos que se realizan a nivel de los predios, a los efectos de mejorar la producción así como aquellos movimientos de animales previo al sacrificio pueden, si no se hacen correctamente, causar un gran deterioro en la salud y bienestar de los mismos, y por ende grandes pérdidas económicas.
La “calidad ética” de un producto es cada vez más exigida por los consumidores y la sociedad en general incide en el uso de animales para diferentes propósitos.
En el mundo ya hay legislación en materia de BA y los gobiernos junto a privados se preocupan cada vez más en mejorar los aspectos relacionados al bienestar de los animales en especial en aquellos países productores de alimento, viéndose como un camino para acceder a mercados que pagan más por productos con garantías de BA y etiquetados para consumidores exigentes.
Estudios realizados en el país, mostraron que más del 50% de las reses faenadas por año (dos millones) presentaban al menos una lesión en el canal motivada por manejos inapropiados con la consecuente remoción de varios kilogramos de carne, significando una cuantiosa pérdida de divisas para el sector productivo en general.
La difusión de las buenas prácticas ganaderas y la capacitación del personal que trabaja con animales es un elemento clave para revertir esta situación.
Es imprescindible difundir los conceptos de que los bovinos sienten dolor, que cualquier manejo rudo que se le practique les hará daño, que son animales de manada (andan todos juntos) y son presa por lo que tenderán a alejarse del ser humano en lugar de atacarlo, a menos que estén acorralados.
Manejando estos conceptos y usando banderas a modo de prolongación de nuestros brazos para conseguir que sin necesidad de acercarnos el animal nos perciba y comience a moverse alejándose, conseguiremos mover o apartar los ganados sin tener que pegarles. De esta manera no dañaremos a los animales, el personal trabajará más seguro y se cansará menos y el producto final que obtengamos será de excelente calidad cumpliendo con el cometido empresarial de la producción.
La capacitación a todos los niveles de la cadena cárnica ha sido fundamental para conseguir disminuir sustancialmente la presencia de lesiones en las reses y mejorar la calidad de la carne.
Sin embargo, se debe tener claro que se trata de un proceso de mejora continua, por lo que se deben implementar mediciones periódicas, ajustes y cursos de actualización para el personal.
Es muy importante medir los indicadores antes mencionados tanto a nivel de predios, como de transporte y sacrificio, para poder diferenciar aquellos que trabajan bien y aspiran a vender sus productos a mejor precio y a mercados que así lo demanden, mediante la implementación de algún tipo de certificación de BA, tal como lo estamos haciendo en Uruguay.
Algunos conceptos a tener en cuenta cuando se trabaja con bovinos:
• Realice las tareas con animales lo más tranquilamente posible.
• Evite el uso de palos y picanas eléctricas, ruidos excesivos, corridas y perros mal entrenados.
• Acostumbre a los animales al contacto con los seres humanos, júntelos a menudo y páselos por el tubo con tranquilidad.
• Mantenga los animales dentro de sus grupos sociales, no deje un animal solo o aislado, trate de no mezclar diferentes edades, categorías y razas antes de cargar el camión.
• Asegúrese que los animales tengan libre acceso al agua antes de ser embarcados.
• Evite embarcar a las horas pico de calor, o en medio de tormentas eléctricas.
• Mantenga sus instalaciones en buenas condiciones, evite mangas rotas, pisos resbaladizos y rampas con mucho desnivel.
• No cargue más animales de los necesarios en ningún vehículo, permita que estén holgados.
Uruguay actualmente tiene un alto estatus sanitario (libre de F. Aftosa c/vacunación, riesgo insignificante de EEB); cuenta con trazabilidad en TODO el rodeo y gracias al compromiso y concientización de todos los operadores (productores, transportistas, industriales y autoridades de gobierno), el país exporta su carne a más de un centenar de mercados y es reconocido a nivel mundial.
Por lo tanto, prestar atención al Bienestar Animal es una GRAN OPORTUNIDAD Y UN BUEN NEGOCIO.
Por: Stella Maris Huertas Canén, DMTV, MSc
Especialista en Bienestar Animal
Directora del Centro Colaborador de OIE
Docente de la Universidad de la República O. del Uruguay