
El “dolor de cabeza” que genera la fiebre porcina africana en China no disminuye
Por: Rafael Tardaguila.
La peste porcina africana (PPA) en China fue el principal motor que impulsó la demanda por proteína animal de este país y, por lo tanto, el que determinó la meteórica escalada de precios a partir de 2018.
Desde China las autoridades aseguran que las existencias de cerdos en el país se recuperaron a 90% de la cantidad que había antes de la epidemia y que en el correr de este año se llegará al 100%. Sin embargo, los mercados no confirman estos datos. Los precios del cerdo en China siguen en niveles históricamente altos y en las últimas semanas tomaron impulso, ante reportes de un resurgimiento de la enfermedad en el país.
La agencia Reuters informó que en el mercado de futuros de Dalian el precio a futuro del cerdo tiende al alza y alcanzó niveles máximos desde que comenzó a operar el pasado 7 de enero. Este mercado es el único que opera con entrega de animales vivos. Los contratos son de 16 toneladas, lo que lleva un camión.
En los últimos días, se supo de nuevas variantes de PPA detectadas en granjas porcinas de China y los expertos de la industria consideran que esto se ha producido debido al uso de vacunas ilegales contra la enfermedad. Se trata de dos nuevas cepas que han afectado a más de 1.000 cerdas en varias granjas, propiedad de la empresa New Hope Lihue, el cuarto productor más grande de China.
De acuerdo con los análisis, a las cepas les faltan uno o dos genes clave y no matan a los cerdos como la enfermedad originaria, pero producen una enfermedad crónica que reduce la cantidad de lechones sanos, consignó Reuters.
A la vez que se da este resurgimiento en China, la PPA sigue generando “dolor de cabeza” en el este europeo y en Alemania, donde se han reportado unos 600 casos en jabalíes, más allá de que sigue sin ingresar a granjas comerciales.
En la medida en que China se demore en recomponer su producción de cerdo, se mantendrá su voracidad en el mercado internacional de todas las carnes.