Sigue la suba y la soja ya llegó a los 500 usd/ton

Por: Carlos Sánchez Negrete, asesor de ADP – Agronegocios del Plata.

 

Los factores que vienen impulsando las subas de la soja siguen vigentes y el mercado lejos de dar un respiro con alguna toma de ganancias, incrementa la velocidad de la suba en las últimas semanas.

Desde el inicio de noviembre hasta los primeros días del año nuevo los precios de la soja en la posición julio en el mercado de Chicago subió +115 usd/ton y el maíz mayo en el mismo mercado subió +37 usd/ton.

 

Sabemos que el cuadro de oferta y demanda de soja de Estados Unidos se viene poniendo cada vez más tirante debido a que desde septiembre se viene reduciendo sostenidamente los stocks finales. Los motivos de la baja de stocks se deben por un lado a la reducción de la producción estimada y por otro a la fuerte demanda de exportaciones (sobre todo por parte de China) y de la molienda interna para producir harina y aceite de soja.

 

Según las estimaciones que publica el Departamento de Agricultura de EEUU (USDA por sus siglas en inglés), entre los meses de agosto y diciembre, la producción estimada de soja bajó -6% y la demanda subió +2%, lo que resultó en una reducción de stocks finales del -71% en el mismo período. Los stocks finales se estiman por debajo de los 5 millones de toneladas en Estados Unidos lo que resulta en una relación stocks/consumo de 3,9%.

 

El otro factor determinante de la suba es el clima seco en Sudamérica, donde se produce el 60% de la soja que se exporta y que viene con un déficit hídrico importante, sobre todo en Argentina. Las lluvias no son las necesarias y cada día que no hay lluvias en los pronósticos se alimenta la suba de precios. Los pronósticos siguen siendo de lluvias por debajo de lo normal para enero y febrero y se necesita agua prontamente.

 

Por último, tenemos un gran catalizador positivo en toda esta suba que es la gran emisión monetaria de los países centrales, sobre todo de Estados Unidos. La emisión monetaria hace que se debilite el dólar y pone presión inflacionaria hacia adelante. Las consecuencias de un dólar más débil lleva a que los precios de las materias primas se abaraten en la moneda de los países importadores y alienten su demanda.

 

Por otro lado, hace que mucho dinero que estaba invertido en acciones y bonos pasen a commodities. Los fondos de inversión están entrando fuertemente a nuestros mercados y eso potencia fuertemente la suba. Hoy los fondos especulativos se encuentran con posiciones netas récord compradas en soja que superan los 45 millones de toneladas. Por ahora la tendencia alcista continúa y el foco está puesto en el reporte del USDA del 12 de enero y en los pronósticos climáticos sobre Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay.

 

Si el USDA llega a reducir nuevamente su estimación de producción para EEUU o aumenta la demanda subiendo su estimación de exportaciones o de molienda, Estados Unidos se quedaría prácticamente sin stocks. Por ello es tan importante que las lluvias confirmen una buena producción en Sudamérica. La tendencia continúa y es de esperar mayor volatilidad.