
Precios de la soja se mantienen al alza mientras se aguarda la cosecha sudamericana
Como viene siendo costumbre el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés) volvió a informar en noviembre producciones de maíz y soja por arriba de lo estimado por los analistas del mercado.
En el caso del maíz +2,18 millones de toneladas y en soja +1,36 millones. Si comparamos los stocks finales, el informe del USDA fue mayor en +3,9 millones de toneladas para maíz y +1,5 millones para soja, respecto de los estimados por los consultores.
En definitiva se esfuma la idea original del mercado que las demoras en las siembras en EEUU ocasionarían pérdidas importantes de producción y por consiguiente menores stocks finales.
Viendo fríamente los números, la relación stocks/consumo finales de maíz están dentro del rango de los últimos 3 años, sin embargo los precios actuales en el mercado de Chicago están en la parte alta del rango de precios de esos años.
En el caso de la soja la relación stocks/consumo es del 12%, si bien es la mitad de la del año pasado, todavía es muy superior al 5% de los años anteriores y muy similar a la de la campaña 2017/18; un nivel que no pone presión en el abastecimiento y por tanto que no necesita racionar demanda con precios más altos. Los precios actuales de la soja en Chicago están 15 usd/ton arriba del año pasado y similares a los del 2017, a igual fecha.
Desde septiembre estamos en una fase alcista en los precios de la soja, que hay que ver si este reporte del USDA no lo interrumpe. Los argumentos de la firmeza están en la renovada demanda de soja de China (en línea con las mejoras en la relación y las negociaciones entre China y EEUU), y en la reducción de los stocks finales en EEUU a la mitad respecto del año pasado.
Esto hace que toda la atención se centre ahora en la nueva cosecha sudamericana que se encuentra a mediados de la siembra. En Argentina está faltando agua en muchos lugares, Brasil tiene un promedio de lluvias trimestral por debajo de lo normal y en Uruguay las lluvias han sido hasta ahora muy abundantes.
Los pronósticos climáticos de mediano plazo para nuestro continente presentan algunas dudas respecto de las lluvias necesarias para un normal desarrollo de los cultivos, y estas situaciones le ponen una prima de riesgo en los precios de la soja nueva. Por tanto, hasta que no esté asegurada la cosecha sudamericana los precios no tienen espacio para bajas muy pronunciadas. El verano será la clave para definir la orientación de los precios.
Por: Carlos Sánchez Negrete, Asesor de ADP Agronegocios del Plata.