
Precios de la soja tenderán al alza impulsados por el fenómeno climático “La Niña”
En las últimas semanas el clima fue crucial para despertar el mercado de la soja. El pulso seco sobre Argentina y Uruguay fue suficiente para establecer rápidamente una prima climática en los precios de la oleaginosa.
En Argentina falta sembrar casi toda la soja de segunda, que ocupará unas 800.000 hectáreas. En tanto, la soja implantada se encuentra en buenas condiciones debido a las reservas de agua acumuladas.
En Uruguay, si bien está casi toda el área sembrada, los suelos no tienen las mismas características de retención de agua, la falta de lluvias comienza a notarse y es necesario que lleguen precipitaciones para que las plantas no comiencen a padecer estrés.
El mercado experimentó una importante suba de precios cuando las lluvias no tuvieron la intensidad ni la cobertura necesarias, lo que demuestra cuán sensible es al escenario climático. Es fundamental considerar esta variable ante la proyección de la llegada del fenómeno de seca “La Niña”, prevista para el período comprendido entre diciembre y febrero de 2018.
El clima también repercutió en el posicionamiento de los fondos especulativos, que comenzaron a armar una posición compradora. Otro factor a tener en cuenta y que ayudó al posicionamiento fue que el mercado esperaba una ruptura hacia abajo de los precios debido a la presión de la cosecha de Estados Unidos, pero finalmente se mantuvo y se interpretaron esos precios como los pisos.
Los meteorólogos más serios estiman que este año “La Niña” llegará en forma moderada, con tendencia a debilitarse a partir de enero. Los pronósticos en general son de lluvias normales para los primeros dos meses del año, aunque con temperaturas por encima del promedio histórico. En este marco, cabe esperar que los stocks abundantes amortigüen los eventuales faltantes de producción.
Si se tienen en cuenta los cuadros de oferta y demanda de soja a nivel mundial y en Estados Unidos, no se encuentran argumentos para prever una tendencia alcista sustentable en los precios.
Estados Unidos cuenta con unos stocks finales para la campaña 2017/18 estimados en 11,6 millones de toneladas y una relación stocks/consumo cercana al 10%. Esto duplica el nivel de ratio del 5%, que fue el disparador de los mercados alcistas en el pasado.
Los stocks aumentan a nivel mundial y se calcula que al final de esta campaña el mundo tendrá 97,9 miles de millones de toneladas de soja, contra 96,3 miles de millones del año pasado, en una clara tendencia a la recuperación. En el caso de América del Sur la situación es aún mejor, ya que el incremento fue de diez millones de toneladas en comparación con las dos campañas anteriores.
Como conclusión, si bien el mercado está bien abastecido enfrenta el escenario climático de “La Niña”. Esto significa que en las semanas sin lluvia se experimentará un rally de precios a la suba. También es de esperar que la volatilidad aumente, ya que es lo que necesitan los especuladores para hacer su diferencia.
Por Carlos Sánchez Negrete.